El penúltimo giro de guión de la temporada 2021 de Fórmula 1 ha llegado en forma de sobresalto sanitario. Nikita Mazepin, el polémico piloto ruso del equipo Haas, ha dado positivo en uno de los habituales test de Covid-19 que se realizan los pilotos en cada jornada de Gran Premio por lo que ha sido puesto en aislamiento y no podrá disputar la carrera.

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Por normativa, Haas no podrá alinear a un sustituto y Mick Schumacher será el único representante que van a tener en la pista de Abu Dhabi para la disputa del último GP del año. Mazepin iba a salir último, su posición más habitual en su primera temporada en Fórmula 1.

"¡Hola a todos! Lamento informar que he tenido una prueba de Covid positiva. Me siento totalmente bien, pero no podré correr hoy. Les deseo a todos mis compañeros pilotos un fantástico final de temporada y les envío las gracias y el amor a todos por su apoyo", ha escrito el piloto.

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Mazepin ya había sido noticia este fin de semana en la clasificación, aunque sorprendentemente no por haber hecho una de sus habituales acciones dudosas, sino por ser la víctima.

Hamilton le estorbó en una de sus vueltas en los entrenamientos libres, obligándole a frenar de golpe. Este tipo de incidentes suele resolverse con una reprimenda, un tipo de castigo que de manera individual no conlleva mayor sanción pero que en caso de reiteración sí puede suponer una penalización. Si los comisarios hubieran actuado como en Arabia Saudí, Hamilton habría sumado tres reprimendas consecutivas y, por tanto, le tendrían que haber metido un castigo de 10 posiciones en parrilla.